¡Hooooooooooooooola! Buenas, ¿qué tal? ¿Bien? Me alegro.
Bueno, coñas aparte, aquí está Lluuuuuuuuuuuull. Sí, Llull, otra vez para daros la lata. Podría escribir esto en mi otro blog, pero no me da la gana.
Hoy es un día especial para Ana, y quiero que sepáis lo importante que es para mí. Voy a resumir un poco nuestra amistad, ¿vale? Así lo entenderéis un poco mejor.
Llevamos juntas desde los tres años. Hoy cumple dieciséis, así que si las mates no me fallan, que creo que no, lleva trece años en mi vida. Hemos pasado por muchos momentos juntas. Desde pasar de un colegio a otro, las clases, las amigas falsas que nos han traicionado.. son tantas cosas. Las peleas con ciertas personas, la manera de estudiar a lo ‘¿quién quiere ser millonario?’, las tardes de verano en la piscina o en casa bailando y haciendo el tonto.
No todo ha sido bueno, también hemos llorado, y mucho. Algunas veces por qué lo necesitamos, otras por tonterías. Bueno, mejor dejemos de lado las chorradas por las que hemos llorado. Lo importante es que estos años han sido geniales gracias a ella. Ha sido la única que ha estado ahí en lo bueno y en lo malo, que nunca me ha dado la espalda. Ella ha sido la única que me ha abrazado cuando solo podía llorar. ¿Entendéis ahora por qué la quiero tanto?
Ella comparte todos mis gustos, o casi todos. Nuestras pequeñas peleas duran horas, o como mucho uno o dos días. Sin ella no soy nada. Ella es a la que se lo cuento todo, la que me hace reír cuando lloro. Ella es esa persona a la que puedes llamar mejor amiga.
Podría pasarme horas escribiendo todo lo que significa que siga a mi lado después de aguantarme trece años, pero creo que no vale la pena marearos más. Mentalízate Llull, nadie leerá esto. Ella ya lo sabe todo y aunque no haga falta que se lo repita, te quiero, y mucho.
Feliz cumpleaños, Ana. <3
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